Como sabeis, Vodafone es un grupo mundial presente en casi 40 paises y con más de 70.000 empleados. Pero todo esto empezó en un pequeño "pueblo" al suroeste de Londres. Este pueblo se llama Newbury pero casi le podriamos llamar "Vodatown" porque un alto porcentaje de sus habitantes y de su riqueza vienen de una sola compañia.
Todo empezó allá por 1984 cuando Racal Electronics ( una empresa especializada en radiocomunicaciones y electrónica ) decide crear una filial para crear la primera Red de Telefonía Móvil del Reino Unido y las ( pequeñas ) oficinas de esa empresa ( Vodafone, por VOice & DAta Tele"FONE" ) se establecen en Newbury. Esta empresa fue creciendo muy rápido y se convirtió en el gran grupo mundial que es hoy Vodafone incluyendo la adquisición de otros grupos monstruo como Airtourch en US o Mannessmann en Alemanía, o de operadores medianos como Airtel en España.
Hasta hace aprox 4 años Vodafone no tenía unas oficinas centrales, por lo que había cientos de edificios en Newbury que servían como oficinas de la empresa. Incluso edificios de viviendas podían tener alguna planta dedicada a Vodafone. Esto cambió con la construcción de los Vodafone Headquarters en las afueras de Newbury donde se concentran los aprox 10.000 empleados de Vodafone Group y Vodafone UK ( el operador en UK ) que trabajan en Newbury.
Creo que ésta era ha tercera vez que iba, y tengo que reconocer que es un entorno muy agradable para trabajar. Entre los seis edificios principales se encuentran unos jardines con lago y tiene un restaurante en el que puedes elegir entre muchos tipos diferentes de comida: asiática, mediterranea, comida rápida, ensaladas diversas... Por cierto, dentro de los edificios hay cafeterías "de verdad" y no sólo máquinas expendedoras como tenemos en las oficinas de España.
Otro día que me escapé por allí os contaré más detalles de la zona y lugares cercanos como Oxford, donde viven casi todos los españoles que están trabajando allí.
Por cierto, de vuelta me pilló el caos en Heathrow donde se encontró una maleta sospechosa y se evacuó la Terminal 2 durante más de 5 horas. Al final en vez de llegar a las diez de la noche llegué a casa a las dos y media de la madrugada, tras sufrir unas colas y desorden de impresión. Si me inspiro lo cuento en más detalle.
